Este lunes la delegada de Turismo, Regla Moreno, junto al profesor Alejandro Pérez Hurtado, investigador al frente del grupo de investigación Conservación de Humedales Costeros y director de los Servicios Centrales de Investigación en Salinas (SC-ISE) de la UCA, han visitado las salinas de San Vicente.
Esta es una de las actividades que se ha llevado a cabo, dentro del curso puesto en marcha por el Ayuntamiento y la Universidad de Cádiz de Guía e Intérprete de Salinas del S.XXI. Como ha explicado Moreno “esta acción pone en valor este lugar, a la ciudad y a este oficio artesano que ha sabido aunar tradición e innovación y despertar con el interés de toda la ciudadanía”. La delegada de Turismo ha querido destacar la labor que realizan los propietarios de estas salinas para convertirlas en un referente “por eso hemos decidido que el alumnado, que está realizando las prácticas de este primer curso, visiten y conozcan parte de nuestro territorio. Ya han visto parte de nuestros senderos, ahora las salinas, esto es una forma de poner en valor nuestro entorno natural y seguir impulsando la actividad económica y el turismo”.
Por su parte el profesor Alejandro Pérez ha destacado la labor del Ayuntamiento para “materializar esta realidad y dar vida a esta idea de volver de nuevo a utilizar este territorio y estos espacios”. En este curso sus 34 los alumnos y alumnas han realizado sus prácticas en la Salina de la Esperanza y en el entorno de San Fernando conociendo de esta manera todos los itinerarios y actuaciones que se realizan en nuestra ciudad sobre economía azul. Como ha explicado el investigador “esta visita es un ejemplo de cómo se ha desarrollado la tradición, la cultura y se ha modernizado”.
Hay que recordar que la segunda de estas formaciones se realizará en los meses de junio y julio y será el curso de salicultores/as del siglo XXI en la Bahía de Cádiz. Tanto el Ayuntamiento de San Fernando y como la UCA van de la mano para trabajar precisamente en la recuperación y puesta en valor de las salinas y esteros de la localidad desde el punto de vista de la biodiversidad y la sostenibilidad, y también desde el ámbito económico de los aprovechamientos sostenibles como espacios productivos.